Esta es una receta muy sencilla y muy vistosa cuando tienes invitados.
La idea la he tomado del propio blog de Boffard, donde además de información sobre sus quesos, tenéis recetas para hacer, algunas de ellas incluso acompañadas de un vídeo para que sea más fácil de seguir. Aconsejo echar un vistazo al blog.
A la receta original le he hecho algunos cambios, ya que el palo de la piruleta lo hacen con pasta filo, al no tener pasta filo en casa el palo lo he hecho con grisines, esos palillos finitos de pan de origen italiano. Este cambio además hace que la receta sea más sencilla y más rápida.
No os puedo decir la cantidad de queso que he utilizado porque no lo pesé, pero calculo que podría haber unos 80 o 100 gr y salieron 14 piruletas con esa cantidad.
Ingredientes:
- Queso Boffard Reserva.
- Grisines.
Elaboración:
Rallamos el queso de tal forma que nos queden hilos finos y largos.
Ponemos un silpat encima de la bandeja del horno y sobre él los grisines. En el extremo de cada grisine ponemos un montoncito del queso rallado.
Precalentamos el horno sobre 160º y horneamos entre 7 y 10 minutos. Cuando veamos que está el queso totalmente fundido y que va adquiriendo un tono un poco dorado lo sacamos. Cuando se enfríe tiene que estar el queso crujiente.
Para servirlos en la mesa, ponerlos en un vaso o en una copa para que los comensales las cojan.