Como ya os comenté hace unos días, fuimos invitados al encuentro Virgen Extra de Jaén 2.0 que se celebró el pasado fin de semana en Jaén.
La mayoría de los blogueros salimos de Madrid, aunque otros se desplazaron desde otras provincias españolas. Nuestro destino era Úbeda, donde se encontraba nuestro alojamiento, más concretamente el Hotel El Postigo, un hotel muy acogedor y en pleno casco histórico y que recomiendo a todo el mundo.
A nuestra llegada ya nos estaba esperando Fernando R. Ortega de ILoveAceite que nos condujo al hotel a dejar el equipaje y donde nos esperaba la primera de las actividades, una estupenda cata de aceite.
Después de dejar el equipaje en las habitaciones bajamos al salón donde se iba a realizar la cata y allí nos estaban esperando Marian Velasco, Vicepresidenta de la Diputación de Jaén. Marcelino Sánchez, Alcalde de Úbeda y Jesús Zafra Ocaña, técnico de promoción. El encargado de hacer las presentaciones fue Andrea, responsable de la empresa Artificis, que como tuvimos la oportunidad de comprobar al día siguiente es un estupendo guía turístico, buen conocedor de la Ciudad de Úbeda y gran comunicador. Una vez que Andrea presento a Marian y a Marcelino, ambos nos dieron la bienvenida y nos transmitieron las expectativas que tenían puestas en este evento.
La cata corrió a cargo de Emilio Tíscar, Secretario General y Director de Certificación del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Sierra Cazorla y excelente profesional que nos guía durante todo el proceso de cata.
Tuvo la gran idea de llevar unos patrones para que pudiésemos oler aceites con ciertos atributos negativos como el atrojado, cocido, borras, moho-humedad, rancio… En otra entrada hablaremos un poco más sobre estas características.
El aceite de oliva virgen es el único alimento en el que su calidad se determina mediante una cata, de ahí la importancia de ser capaz de reconocer los atributos negativos anteriores y también los positivos como el frutado, amargo o picante.
Tras la cata, breve descanso y listo para salir a Baeza a dar un paseo nocturno por la ciudad en el que Seba de Pópulo nos fue guiando y explicando algunos de los numerosos monumentos que hay en Baeza.
Después de ese maravilloso paseo y con mucha hambre, ruta de tapas. Empezamos en el restaurante La Góndola, donde pudimos degustar un paté de perdiz sobre espejo de aceite de oliva, continuamos con unas patatas baezanas y para terminar unas alcachofas rellenas de bacalao.
Continuamos en el restaurante El Trillo, donde degustamos unas tostas variadas, unas setas rellenas de jamón, un crujiente de verduras y una pasta de arroz rellena de bacalao con alioli.
Tras este largo día, toca volver al hotel a descansar para cargar las pilas porque el segundo día promete ser más intenso todavía. Algunos aún se quedaron en el hotel a tomar algún que otro gin tonic, pero la mayoría estábamos bastante cansados y decidimos subir directamente a dormir.