Hoy os traigo otro guiso de legumbres, en esta ocasión con marisco. Sin lugar a dudas las legumbres deben de ser parte de dieta. Hemos de desterrar la creencia de que engordan, ya que por sí solas no es así, y menos en el caso de las judías que son de las que menos aporte calórico nos proporcionan. Por tanto no tenemos que renunciar a ellas, si no buscar un acompañamiento acorde a la ingesta de calorías que queramos.
En esta ocasión la idea surgió sobre la marcha así que tiré de alubias de las que ya vienen cocidas, aunque os recomiendo que si pensáis preparar la receta, pongáis a remojo la noche antes alubias secas y cocerlas vosotros.
Otra recomendación es que la hagáis el día de antes, ya que estarán más tomadas y ganarán en sabor. Además llegar a casa y encontrarte con un plato como este listo para comer no tiene precio.
Ingredientes:
- 2 botes de alubias cocidas.
- 18 langostinos.
- 200 gr. de pulpo cocido.
- 1 kg de mejillones.
- 1 cebolla.
- 1 zanahoria.
- 1 diente de ajo.
- 1 tomate.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Sal.
Elaboración:
Pelar los langostinos dejando únicamente sin pelar la parte de la cola. Reservar los langostinos pelados por un lado y las cabezas por otro.
Poner una cazuela con un poco de aceite y rehogar las cabezas y cáscaras de los langostinos apretando las cabezas con una cuchara de madera para que suelte todo el jugo. Cuando estén bien rehogados, añadir unos 400 ml. de agua fría y dejar a fuego suave durante unos 20 minutos. Pasado este tiempo colar con un chino, apretando con la maza del mortero para sacar todo el jugo posible.
Limpiar bien los mejillones desechando los que tengan las conchas rota. Poner una cazuela con un poco de agua y un chorro de vino blanco y abrir los mejillones al vapor. Una vez abierto colar el caldo por un colador de tela y mezclarlo con el caldo de los langostinos. Probarlo por si estuviese muy salado añadir un poco de agua.
En la cazuela donde vayamos a hacer las alubias, saltear los langostinos con una cucharadita de aceite durante un minuto aproximadamente. Sacarlos y reservarlos.
Pelar la cebolla, el ajo y la zanahoria y picarlas fino. En la misma cazuela que hemos salteado los langostinos, sofreír la verdura a fuego suave durante unos 8 minutos. Incorporar el tomate rallado y seguir cocinando unos 4-5 minutos más. Retirar de la cazuela y triturar con la batidora.
Volver a poner el sofrito en la cazuela junto al caldo y las judías que previamente habremos pasado bajo un chorro de agua fría. Dejar cocer a fuego suave durante 10-15 minutos. No mover con la cuchara, sino mover la cazuela con movimientos de vaivén para no romper las alubias.