Este arroz ibérico lo he llamado así porque he utilizado en su elaboración dos productos magníficos del cerdo ibérico, pluma y tocino.
La pluma es una de esas piezas de carne que se han empezado a comercializar como tal de unos años para acá. Se encuentra en la parte anterior del lomo. Su particularidad es que tiene bastante grasa infiltrada, lo que hace que sea jugosa, tierna y sabrosa. La importancia de que esta pieza sea de cerdo ibérico no solo radica en el sabor, sino que al no llevar mucho tiempo de cocción el arroz, si no fuese así, la carne nos quedaría dura.
Qué os voy a contar del tocino ibérico, esas piezas que encontramos bajo la denominación de ibérico de bellota son extraordinarias y casi lo único que podemos encontrar de este animal a buen precio. Cortado finito, como hacemos aquí, puesto sobre un ingrediente caliente, en este caso el arroz, que se funda su grasa y se impregne de ella el alimento sobre el que va es magnífico. Sin duda infravalorado.
El resto de ingredientes, vegetales y un caldo casero; en esta ocasión de verdura que es el que tenía en el congelador.
Ingredientes:
- 250 gr. de arroz de grano redondo.
- 60 gr. de pimiento rojo.
- 5 espárragos trigueros.
- 1 cebolla morada.
- 2 dientes de ajo.
- 2 tomates rojos maduros.
- 250 gr. de pluma de cerdo ibérico.
- 65 ml.de vino blanco.
- 900 ml. de caldo de ave o de verduras.
- Hebras de azafrán.
- Sal.
Elaboración:
Picar la cebolla, el ajo y el pimiento en daditos pequeños. Picar los espárragos en trocitos dejándo las yemas enteras. Poner un chorro de aceite en una cazuela y cuando esté caliente echar la verdura anterior y rehogarla durante 5 minutos.
A continuación incorporar la presa ibérica cortada en cuadraditos de 1 cm aproximadamente. Seguir rehogando hasta que esté hecha por fuera. Regar con el vino y dejar hasta que evapore.
Añadir el tomate rallado y dejar rehogando todo hasta que se evapore el líquido del tomate y presente una textura melosa. Incorporar en ese momento el arroz y rehogar durante 2 minutos moviendo de vez en cuando.
Riega con el caldo muy caliente y déjalo cociendo durante 20 minutos aproximadamente. Al final de la cocción ve probando y cuando veas que está al dente, apaga el fuego y deja reposar unos minutos.
En el momento que lo tengamos servido en el plato, poner por encima unos trocitos de tocino ibérico cortados muy fino para que con el calor que desprende el arroz se funda.