Llevaba bastante tiempo queriendo hablar de un utensilio que lleva varios meses en mi cocina. Tengo una sección denominada "utensilios de cocina" donde me gusta hablar de todo lo que me parece útil y de ayuda en la cocina y hoy os quiero hablar de este que utilizo para conservar los alimentos de forma natural.
Recorriendo los diferentes stands en la pasada edición de Madrid Fusión, hubo uno especialmente que me llamo la atención e hizo que me parase a "cotillear" un poco. Era un stand con unos recipientes cerámicos en algunos de los cuales había en su interior frutas, verduras, pan y otros productos. Así fue como conocí estos recipientes que comercializa la empresa Fizpílar.
Si os pregunto si lo conocéis, la mayoría me diréis que no, pero si os pregunto si conocéis el botijo o la tinaja, la cosa cambia. Aunque hoy día cada vez se ve menos, los que ya tenemos unos años hemos bebido el agua del botijo o de la tinaja, y además al principio nos hemos extrañado que conserve el agua fresca, cuando en el exterior hace una temperatura mucho mayor.
Os digo lo anterior, porque estos recipientes de los que hoy os hablo están basados en el principio del botijo, consiguiendo con ello aumentar el tiempo de conservación al mismo tiempo que va madurando de una forma natural algunos de los productos que en ellos introducimos. Me diréis que para eso ya tenemos el frigorífico. En parte tenéis razón, pero cuantas veces hemos metido tomates verdes en el frigo y después de muchos días siguen igual de verdes y cuando los vamos a consumir no tienen sabor ninguno. Lo mismo ocurre con el queso o con otros muchos alimentos.
Los recipientes Fizpílar están fabricados con arcillas naturales de extracción directa sin aditivos. No lleva esmaltes, pinturas con base de plomo o cadmio u otros materiales nocivos. A pesar de su porosidad, el tratamiento en el horno a elevadas temperaturas consigue una perfecta esterilización orgánica ideal para su uso. Por supuesto cumple toda la normativa europea para su uso alimentario. Por tanto, se trata de un producto totalmente natural y ecológico.
Aunque hace meses que dispongo de uno en casa, este verano además me invitaron a un taller con Jesús Almagro en la Escuela Sueños de Cocina, donde los platos que cocinó estaban confeccionados con frutas y verduras que las habían madurado en estos recipientes cerámicos. En cada recipiente había un termómetro-higrómetro y fue curioso como en el momento que se quitaba la tapadera la temperatura comenzaba a subir y la humedad a bajar. Esa temperatura y humedad controlada de forma natural es lo que hace que el alimento aquí introducido se conserve en óptimas condiciones de forma natural.
Podéis conocer más sobre ellos en la página web de Fizpílar.
Las tapas que incoporarn están elaboradas con materias vegetales naturales conformadas con colas inocuas para la alimentación. También la
madera y la fibra vegetal de bambú son materiales idóneos para
aislar y mantener las condiciones suficientes de humedad y temperatura
de forma natural dentro de los recipientes
Aunque hace meses que dispongo de uno en casa, este verano además me invitaron a un taller con Jesús Almagro en la Escuela Sueños de Cocina, donde los platos que cocinó estaban confeccionados con frutas y verduras que las habían madurado en estos recipientes cerámicos. En cada recipiente había un termómetro-higrómetro y fue curioso como en el momento que se quitaba la tapadera la temperatura comenzaba a subir y la humedad a bajar. Esa temperatura y humedad controlada de forma natural es lo que hace que el alimento aquí introducido se conserve en óptimas condiciones de forma natural.
Podéis conocer más sobre ellos en la página web de Fizpílar.