Estamos en plena temporada de fresas y nos gustan tanto que no solo las tomamos a cualquier hora como fruta, sino que además, como en esta receta, preparamos una rica salsa para acompañar esta carne a la plancha.
Las unimos en esta receta a una pieza de carne que también es una delicia, el secreto. El secreto es una pieza de carne que se encuentra en el cuarto delantero del cerdo, pegada a la paleta por la parte interior. Es muy vetada, lo que hace que sea muy jugosa a la vez que tierna. El mejor en cuanto a sabor es el de ibérico, pero incluso el de blanco, siempre que se trate de cerdos grasos, es un deleite para el paladar.
Ingredientes:
- 4 filetes de secreto.
- 350 gr. de fresas.
- 3 cucharadas de azúcar moreno.
- 2 cucharadas de vino blanco.
- 1 cucharada de vinagre balsámico de Módena.
- Sal.
- Pimienta recién molida.
- Unas hojitas de menta fresca.
Elaboración:
Lavar bien las fresas, quitar los tallos y las hojas verdes y trocearlas. Reservar algunas enteras para la decoración final.
Poner una cazuela al fuego y echar las fresas troceadas junto al azúcar, el vino y el vinagre. Cocinar a fuego suave durante unos 20 minutos aproximadamente removiendo de vez en cuando con una cucharada de madera. Nos tiene que quedar como una textura de mermelada pero un poco más líquida.
Sacar la carne del frigorífico media hora antes de asarla y dejar que se atempere. Salpimentar
Untar una placa con aceite y cuando esté muy caliente echar el secreto, hacer durante un minuto, dar la vuelta y asar durante otro minuto. Ahora que ya tenemos la carne sellada, bajar el fuego y seguir cocinando varios minutos más por las dos caras hasta que esté a nuestro gusto. El tiempo dependerá del grosor y como nos guste. Es importante no pinchar la carne al dar la vuelta.
Servir el secreto acompañado de la salsa de fresas a la que hablemos puesto un poco de menta picadita.
