Cheese Bar, el paraíso para los amantes del buen queso


El pasado 30 de junio tuvimos la suerte de poder asistir a la inauguración del Cheese Bar, un paraíso para todos los amantes del buen queso.


El Cheese Bar está situado calle José Abascal de Madrid. En sus casi 700 metros cuadrados distribuidos en dos plantas la nueva propuesta de Poncelet aglutina una de las mayores y más cuidadas ofertas internacionales en torno al queso. Su carta dispone de 146 variedades, procedentes de las 17 comunidades autónomas españolas y de ocho países europeos.


Dentro de esta amplia selección están representados los cuatro tipos de leche empleadas habitualmente para la elaboración del queso: cabra, oveja, vaca y búfala, así como diferentes mezclas de estas leches. También hay un buen número de otros productos lácteos especialmente pensados para el desayuno, como yogures, requesones, quesos frescos, recuit, mato, cuajadas y las cuatro clases de leche nombradas anteriormente 


Con el fin de facilitar la elección de los clientes, existen tablas ya establecidas que cambian periódicamente, con selecciones de quesos por temporada, origen, variedades, etc. Según el tipo de queso elegido, el servicio irá acompañado de confituras, chutneys, membrillos, verduras, mermeladas… y, por supuesto, del mejor pan. 


Por su parte, la carta de vinos es amplia y variada, y está adaptada a la oferta gastronómica. Los vinos blancos son mayoría, pero también hay tintos, cavas, champanes y vinos dulces, así como sidras naturales y una selección de cervezas artesanales de pequeña producción.

Pudimos degustar dos tablas de queso, en ellas los quesos aparecen de menor a mayor intensidad, la primera tabla compuesta de los siguientes quesos: Pomodoro, queso belga, de leche pasterizada de vaca a la que se le añade tomate y albahaca. Valançay, queso francés de leche cruda de cabra, cuya corteza se recubre con la ceniza salada del carbón de leña. Idiazabal, del País Vasco, de leche cruda de oveja de la raza latxa. Munster, de Francia, de la zona de Alsacia, elaborado con leche cruda de vaca, un queso que no conocía pero que me cautivó por su intensidad fuerte, pese a ser de leche de vaca. El último de la tabla era un Roquefort, como ya sabéis, típico queso francés elaborado con leche cruda de oveja.


La segunda de las tablas incluía los siguientes quesos: Brillat Savarin, de Francia elaborado con leche cruda de vaca. St Maure de Touraine, de Francia, de leche cruda de cabra. Grazalema, de Andalucía, de mezcla de leche de cabra y oveja, corteza recubierta de manteca de cerdo. Valdeon, de Castilla y León, elaborado con leche pasterizada de vaca.


Todos ellos los acompañamos con Gran Cava d'Abbatis Brut Nature de Celler Camp de Tarragona.

En todo momento se nos aclararon nuestras dudas y estuvimos perfectamente informados de las características de los quesos que se nos sirvieron por el Maitre Fromager.


Con respecto al diseño arquitectónico, se trata de un espacio innovador, que ofrece el ambiente más adecuado para ver y degustar los quesos que se ofertan. Cheese Bar se caracteriza por su amplitud y ligereza en elementos decorativos, jugando con colores suaves y luminosos, que invitan a un consumo relajado y placentero. El restaurante cuenta con dos barras,  una en la entrada y otra al fondo del local, las dos con sillas altas para los clientes que prefieran disfrutar de una comida informal.


Al fondo de la planta baja se encuentra la cava de quesos y de vinos, totalmente visible para el cliente.


Cuenta además con numerosas mesas donde poder degustar las estupendas tablas de quesos.


Otro elemento, en este caso decorativo, muy curioso; es el primer jardín vertical de interior en Madrid, un jardín de 30 metros cuadrados con más de 1000 plantas naturales.

Paco de Lazy Blog y Bea Rivero con el jardín vertical al fondo

Hasta tal punto gira todo en torno al queso, que en la planta superior nos encontramos con una biblioteca donde hay un gran número de volúmenes sobre el mundo del queso y de la gastronomía en general.


¡Ah!, si te acompaña alguien que no le gusta el queso, no te preocupes, también cuentan en la carta con algunos platos denominados “Anti-quesos”.

Si vives fuera de Madrid y quieres probar algunos de los 146 tipos de quesos de la carta, los podéis adquirir a través de la web de Poncelet, donde además tenéis todo tipo de información sobre el queso en general y en particular sobre los que comercializan. Echad un vistazo a su web que merece la pena.

LinkWithin

Related Posts with Thumbnails
Google Analytics Alternative