Este pulpo con patata confitada se lo dedico a Julia, que en el comentario que ha dejado en la entrada anterior sobre el Pimentón de La Vera, ampliaba la entrada y además pedía un plato que llevase pimentón, aunque evidentemente este que propongo no es típico de Extremadura. Otro día pondremos otro típico de la tierra.
En el pulpo a la gallega cuando se le pone patata suele ser cocida. En este caso le he puesto patata confitada que a mí me gusta más.
Confitar algo en cocerlo en aceite a muy baja temperatura. En ningún momento el aceite tiene que hervir, porque si no se freiría, y no es lo que queremos. Tenemos que poner un buen aceite de oliva virgen extra y que cubra por completo el producto que queremos confitar, en este caso las patatas. Vale también para otras verduras como el ajo, cebollitas e incluso carne o pescado. Quizás lo más conocido en la carne sea el confit de pato y en pescado me gusta mucho el bacalao.
Las patatas las he hecho en forma de tubos redondos. Le he dado esa forma con un descorazonador de manzana, pero en el caso que no tengamos, las podemos hacer en forma de rectángulos.
El pulpo lo he comprado ya cocido y el pimentón me gusta el agridulce, dulce con un toque picante.
Ingredientes:
- Pulpo cocido.
- Patatas
- Pimentón agridulce de la Vera
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal Maldon
Elaboración:
Pelamos las patatas y con un descorazonador sacamos tubos.
Ponemos abundante aceite a calentar, aproximadamente entre 60 o 70º. Si no tenemos un termómetro a ojo. Echamos las patatas y deben cocerse, no freírse.
Cuando las patatas estén confitadas, las escurrimos bien sobre un papel absorbente y en una brocheta ponemos un trozo de pulpo cocido y un trozo de patata confitada. Ponemos un poco de sal Maldon y espolvoreamos con el pimentón agridulce.
